Imagina que justo has acabado de editar un vídeo y quieres compartirlo con tus amigos o compañeros. Cuando ya casi lo has enviado con una aplicación de mensajería o una red social, ves que la calidad parece mucho menor. ¿Te suena?
En esta guía, se explica por qué los vídeos pueden perder calidad al enviarlos y se describen cuatro métodos para compartirlos sin tener este problema.
¿Por qué pierden calidad los vídeos cuando se envían?
El motivo por el que los vídeos pueden perder calidad al enviarlos tiene que ver con el tamaño de archivo.
Cuando se envían datos por Internet, tanto si es un mensaje de texto, un correo electrónico o una imagen como si es un vídeo en alta definición, el archivo tiene un tamaño. Los archivos grandes tardan más en enviarse y se tienen que alojar en algún lugar para poder usarlos.
Las aplicaciones y las redes sociales comprimen los archivos grandes, como las imágenes y los vídeos en alta resolución, para que ocupen menos. Es una estrategia para mantener las velocidades de carga del contenido y el uso de datos móviles en niveles bajos.
Todo esto tiene un precio: las imágenes pueden verse borrosas, y los vídeos pueden tener menos fotogramas y parecer menos fluidos. En ocasiones, y en función de cuánto se haya comprimido el contenido, los detalles más sutiles, como la letra pequeña, pueden quedar ilegibles.
Aunque esto pueda valer para enviar un meme o un vídeo divertido a los amigos, es obvio que será un problema para los profesionales que quieran enviar vídeos en alta resolución a sus clientes. Los fotógrafos de bodas, por ejemplo, necesitan una forma de compartir archivos sin comprimirlos ni quitarles calidad. Del mismo modo, cualquier persona que quiera compartir vídeos con amigos o familiares y decida que la calidad original es importante tendrá problemas similares con la compresión.
Si quieres enviar vídeos sin que pierdan calidad, tendrás que usar un método que no comprima los archivos.
Cómo enviarles vídeos a los clientes sin que pierdan calidad: cuatro métodos
En esta sección, veremos cuatro formas distintas de enviar un vídeo sin que pierda calidad. Cada una tiene sus usos y beneficios.
Compartir vídeos con un servicio de almacenamiento en la nube
El almacenamiento en la nube sirve para alojar vídeos en alta resolución y compartirlos con otras personas usando un enlace. Este método puede ser útil cuando hay que compartir archivos de vídeo de calidad completa con clientes y colaboradores, y estas personas no tienen que descargar una copia; por ejemplo, en una revisión con comentarios. Obviamente, como tendrás acceso de edición, podrás descargar una copia del servicio de almacenamiento en la nube siempre que lo necesites.
El almacenamiento en la nube de Dropbox te ayuda a hacer todo esto porque ofrece funciones como las siguientes:
- Uso compartido de enlaces: solo hay que pegar un enlace al vídeo en el chat de grupo para que todo el mundo pueda verlo en resolución completa.
- Permisos de acceso: controla quién puede o no puede ver, compartir o editar tu contenido. Puedes dar y retirar el acceso según te convenga.
- Organización y exploración de archivos: si almacenas tus vídeos en Dropbox, podrás organizarlos fácilmente en carpetas y encontrar archivos con la función de búsqueda.
- Acceso desde cualquier lugar: mira y comparte tus vídeos estés donde estés y con el dispositivo que uses. Solo necesitarás una conexión a Internet y un navegador web.
Enviar vídeos con un servicio de transferencia de archivos
Si tienes que enviar una copia de un vídeo para que se pueda descargar en un dispositivo o quieres compartir un archivo de vídeo grande de forma rápida y segura, un servicio de transferencia de archivos es la mejor opción.
Puede ser el mejor método para los profesionales de vídeo que tengan que enviarles copias finales a sus clientes para que las descarguen. No interesa que compartan el acceso a una sola copia, sino que reciban una propia y la descarguen.
Aquí es donde entra Dropbox Transfer, que ofrece funciones de transferencia de archivos integradas:
- Transferencia de archivos grandes: envía hasta 100 GB de archivos a la vez. Es ideal para exportar vídeos grandes.
- Marca personalizada en las páginas de descarga: haz que lo primero que vean tus clientes les encante.
- Protección con contraseña y vencimiento de los enlaces: los archivos estarán protegidos y a mano, siempre según tus preferencias.
- Confirmación de entrega: evita tener que enviar correos de seguimiento; recibirás una notificación cuando se descarguen los archivos.
Recibir comentarios con anotaciones en los vídeos
¿Compartes vídeos para que escriban comentarios y opiniones sobre ellos? Si es así, una plataforma de comentarios en vídeos específicamente diseñada para ese fin como Dropbox Replay te será útil para ahorrarte la molestia de recopilar comentarios de varias fuentes.
Es justo lo que necesitan los profesionales creativos que quieren que sus clientes opinen sobre una primera versión sin tener que compartir el archivo y esperar a que los comentarios lleguen en un correo electrónico.
Con Dropbox Replay, tus clientes y colaboradores pueden hacerte llegar sus opiniones directamente en los vídeos mediante notas de fotogramas concretos y comentarios útiles, todo sin salir de la herramienta.
Dropbox Replay ofrece estas facilidades:
- Crear una sala de visionado virtual: mira y revisa el vídeo con tu equipo o tus clientes en tiempo real.
- Compartir enlaces: solo tienes que compartir un enlace para empezar a recibir opiniones en forma de notas de fotogramas concretos y en pantalla.
- Acceder al contenido desde un navegador web: no hay que tener accesos especiales, ningún otro software ni una cuenta de Dropbox.
- Gestionar las versiones fácilmente: cambia de versión y conserva los comentarios de cada una por separado.
Enviar vídeos por correo electrónico
Por supuesto que, si buscas una solución rápida, una opción es enviar los vídeos como archivos adjuntos de un correo electrónico.
Si lo haces, hay que tener en cuenta algunas limitaciones. Por ejemplo:
- Los límites de tamaño de archivo, que no suelen ser de más de 15 o 20 MB.
- Después del envío, no hay ningún control sobre el archivo adjunto. Tampoco se puede retirar el acceso.
- Es necesario saber la dirección de correo electrónico de los destinatarios.
A pesar de estas limitaciones, si quieres enviar un vídeo pequeño, es posible que puedas hacerlo por correo electrónico sin que pierda calidad. En la mayoría de los casos, los servicios de transferencia de archivos son una opción más sencilla y flexible.
¿Cuál es la mejor forma de enviar vídeos sin que pierdan calidad?
No hay ninguna forma de enviar vídeos sin que pierdan calidad que sea mejor que las demás. Lo acertado es hablar de métodos más o menos adecuados según las necesidades:
- Si quieres compartir un vídeo, pero no es necesario que los destinatarios descarguen una copia, lo mejor es enviar un enlace con un servicio de almacenamiento en la nube.
- Si los destinatarios tienen que descargar una copia, usa un servicio de transferencia de archivos como Dropbox Transfer.
- Si quieres recibir opiniones sobre un vídeo, usa una plataforma de comentarios en vídeos como Dropbox Replay.
Enviar vídeos de alta resolución sin complicarse gracias a Dropbox
No hace falta que enviar un vídeo sea complicado ni que el público se quede sin saber qué pensar.
Consigue que tus vídeos causen la impresión que deberían y compártelos con toda su calidad para que todo el mundo disfrute viéndolos.
Da igual que quieras compartir un vídeo con un enlace, enviar una transferencia de archivo grande o, sencillamente, recibir comentarios: enviar vídeos de resolución completa es fácil con Dropbox.