Cualquiera en TI conoce los desafíos de hacer la transición de las personas para que adopten una nueva solución. Una vez que la gente aprende algo nuevo, se pone cómoda y quiere quedarse siempre con eso. Entonces, cuando TI debe migrar personal de una plataforma a otra, a menudo se siente como si les tuviéramos que sacar una muela y nos ven como a los tipos malos.
Afortunadamente, en Jamf, encontramos la manera de superar al menos parte de esa resistencia. Escuchar a nuestros usuarios finales y lo que quieren usar en el trabajo, en lugar de obligarlos a usar lo que instala TI, cuando es posible, casi siempre facilita mucho la vida de todos.
Nuestra misión general en Jamf es ayudar a las organizaciones a tener éxito con Apple. Ayudamos a los profesionales de TI y seguridad a administrar y proteger con confianza los dispositivos, datos y aplicaciones de sus usuarios finales. Y la parte en la que Jamf aporta un valor extra especial, tanto a nuestros empleados como a nuestros más de 71 000 clientes en todo el mundo, es que somos capaces de brindar ese servicio sin interponernos en la experiencia de Apple prevista. Este es un acto de equilibrio necesario para mantener las operaciones seguras y garantizar el cumplimiento con el usuario final… mientras se brinda esa experiencia nativa de Apple, poderosa y única.
Seguimos el ejemplo de nuestros usuarios
TI se preocupa profundamente por nuestros productos y plataformas, y mi equipo tiene una excelente visión de cómo podemos aprovechar las soluciones para servir mejor a nuestros clientes y a la compañía. Cuando se trataba de nuestra solución de almacenamiento y uso compartido de archivos, sin embargo, estábamos un poco equivocados.
La última solución de almacenamiento y uso compartido que utilizamos funcionó bien para TI y respondió a nuestras necesidades. Pero notamos que los empleados parecían gravitar naturalmente hacia Dropbox. Casi todos ya usaban Dropbox para sus archivos personales, y les gustaba tanto que encontraban la alternativa para seguir usando Dropbox.
Estábamos usando uno de sus competidores y, sin declararlo abiertamente, nuestros empleados nos decían que preferían usar Dropbox.
Con la adopción y activación rezagadas con nuestra última solución, estaba claro que los equipos y los empleados preferían Dropbox. Tuvimos que decidir: ¿debería la dirección obligar al personal a utilizar la plataforma que considerábamos mejor? ¿O mostrar nuestro apoyo a las herramientas que ellos disfrutaban usar? Después de una revisión exhaustiva, decidimos que tenía sentido asegurar y mejorar su solución preferida en lugar de obligarlos a dejar de usarla.
La buena noticia fue que la migración a Dropbox fue bastante simple. La mayoría de los empleados no necesitaba capacitación ni inducción formal. El único esfuerzo real fue transferir nuestros flujos de trabajo de negocios a Dropbox. Una vez que eso se completó, todos estuvieron contentos.
En este caso, todos ganan: TI es el héroe que escucha al personal; la empresa está feliz porque tenemos una solución que funciona y es rentable; los empleados están contentos porque se sienten escuchados y ya no tienen que usar una herramienta que no es intuitiva para ellos. Ahora podríamos centrar nuestra atención en mejorar nuestra experiencia colectiva de Dropbox.
Mucho más que uso compartido de archivos
Desde que cambiamos a Dropbox, hemos descubierto una serie de características que hacen la colaboración más inteligente y optimizada:
+ Dropbox Paper: utilizamos Paper como espacio digital para documentos más transitorios, como notas de reuniones y agendas. Con el tiempo, se ha convertido en una especie de bloc de notas para ideas. Paper permite a muchas personas trabajar en un documento de manera simultánea sin sobrescribir lo de nadie ni perder el tiempo en versiones obsoletas. Poder agregar texto, imágenes y otros medios en un solo lugar ha mejorado nuestras capacidades de colaboración en tiempo real y ha ayudado a mantener nuestras reuniones a tiempo y en tema. Además de estos beneficios, Paper ofrece una gran experiencia móvil, perfecta para cuando andamos sin parar.
+ Dropbox Capture: Capture permite que los usuarios graben la pantalla, la cámara y el micrófono al mismo tiempo. Piensa en la última vez que tuviste que reportar un problema al soporte técnico. Por lo general, hay mucho ida y vuelta para ayudar a TI a entender el problema. Con Capture, los empleados pueden enviarnos un informe de problemas, incluidas una descripción y una captura de pantalla o grabación del problema mientras está sucediendo. TI puede comenzar a solucionar problemas casi de inmediato.
Capture ha acelerado el proceso de gestión de cambios porque ahora podemos capturar el cambio propuesto en un video y hablar de ello de forma asincrónica a través de Slack, en lugar de tener que organizar una reunión.
Capture también hace que las demostraciones de innovación sean más rápidas y fáciles. En lugar de convocar a una reunión para revisar la idea en conjunto, los desarrolladores pueden demostrar y describir la solución en acción. La diferencia es un proceso acelerado de gestión del cambio porque la gente puede mostrar en lugar de contar.
Una experiencia remota más segura
Dropbox es genial por sí solo, pero la combinación de Dropbox, Apple y Jamf también ha dado lugar a potentes controles de seguridad. Ahora, proteger los intereses comerciales y la privacidad del usuario pueden coexistir.
Parte del desafío con el trabajo remoto es el potencial de mezclar dispositivos de usuario final designados para uso personal y empresarial. Tener dispositivos separados puede ser engorroso, pero utilizar un único dispositivo para el trabajo y el uso personal puede generar algunas alertas en torno a la seguridad, la privacidad y el cumplimiento. Gracias a las capacidades de seguridad de Apple y Jamf, los datos personales y empresariales pueden vivir en el mismo dispositivo sin preocupaciones. Dropbox ha mejorado nuestros procesos de colaboración, y el complemento de gobierno de datos nos ayuda a adherir mejor a las regulaciones de cumplimiento, las leyes de privacidad y el derecho a la solicitud de eliminación o borrado de datos.
Lo que comenzó como un intento de ir con la corriente ha florecido hasta convertirse en una herramienta tecnológica sólida que funciona sin quejas. TI es feliz, nuestros equipos están contentos y podemos ocuparnos de servir a nuestros clientes de manera más eficiente que nunca.